La vasectomía es un procedimiento quirúrgico de esterilización masculina que impide de manera permanente la posibilidad de tener hijos. La intervención es llevada a cabo por uno o más urólogos, que son médicos especializados en el diagnóstico y tratamiento de las condiciones que afectan el sistema genitourinario, que incluye los órganos reproductores masculinos y el sistema urinario.
Durante este procedimiento, los conductos deferentes, que son los tubos que transportan los espermatozoides desde los testículos hasta la uretra, se cortan o se bloquean, lo que evita que los espermatozoides lleguen al semen eyaculado.
Se trata de una cirugía relativamente sencilla que se puede realizar en una clínica, consultorio médico u hospital. Generalmente se realiza bajo anestesia local y puede durar alrededor de 20 a 30 minutos.
En lo que afecta al tiempo de recuperación, la mayoría de los hombres pueden reanudar sus actividades normales después de unos pocos días de reposo y cuidados posteriores al procedimiento. Algunos hombres pueden experimentar dolor, hinchazón o hematomas en la zona genital después de la cirugía. Estos efectos suelen ser temporales y se pueden manejar con analgésicos y descanso.
Efectividad y reversibilidad
Aun siendo una técnica altamente efectiva, después de la vasectomía, se debe usar un método anticonceptivo adicional durante un tiempo hasta que se confirme que no quedan espermatozoides viables en el semen. Esto generalmente se logra después de un cierto número de eyaculaciones o después de pruebas de seguimiento.
La vasectomía no afecta a la función sexual, pero la eyaculación puede cambiar ligeramente. Aunque la cantidad de semen no se reduce significativamente, puede ser más líquida, ya que los espermatozoides representan una pequeña parte del volumen total del semen.
Respecto a su reversibilidad; aunque es posible revertir una vasectomía mediante un procedimiento llamado vasovasostomía, no se garantiza que la fertilidad se restablezca completamente. Por lo tanto, la vasectomía debe considerarse una decisión permanente.
Uroclínic Center
En Uroclínic Center recomendamos que antes de someterse a una vasectomía, se discuta el procedimiento con uno de nuestros urólogos, y se consideren las implicaciones emocionales y psicológicas de la decisión para el paciente y su entorno.
Nuestros profesionales se encargarán de realizar una evaluación exhaustiva de la salud del paciente antes de la intervención y les explicarán el procedimiento en detalle, sus beneficios y posibles riesgos, así como las alternativas disponibles.
El urólogo es también el profesional encargado de llevar a cabo el procedimiento, él cortará o bloqueará los conductos deferentes, que son los tubos que transportan los espermatozoides desde los testículos hasta la uretra. Generalmente con anestesia local para minimizar cualquier molestia o dolor.
Después de la cirugía, el urólogo proporciona instrucciones detalladas sobre el cuidado posterior y la recuperación, programando citas de seguimiento para verificar la progresión adecuada de la recuperación y confirmar que el procedimiento ha sido exitoso en la prevención de la fertilidad. En caso de que surgiera cualquier complicación, nuestros urólogos evaluarán y trataran los posibles contratiempos.
Desde Uroclínic les proporcionaremos un asesoramiento a largo plazo y atención prácticamente inmediata.